En el mercado actual, las marcas han pasado de ser un simple nombre o símbolo para un producto o servicio, a representar un papel protagonista en ciertas experiencias y situaciones vividas por el consumidor. Los brand managers son los encargados de reforzar, mantener o crear estas asociaciones relevantes, a través del diseño de la estrategia de marca y la cultura corporativa entre otros, para que el consumidor perciba asociaciones positivas que le lleven a la compra.
Y la herramienta principal que utilizan para contar historias, con la finalidad de comunicar, motivar, formar, cautivar, entretener, y, como última instancia, vender; es el storytelling. Y ese relato tiene que tener relación con algún elemento del producto o servicio, representando una realidad creíble y auténtica, que le permita seguir creciendo mantenido su esencia de marca en la mente del consumidor. Por ello, cuanto más emotiva, mejor. Pues para interactuar con los consumidores, crear experiencias buscando un feedback e interacción, e incluso alcanzar la venta y fidelidad; lo principal es conectar emocionalmente con él.
Dejarle huella no es tarea fácil, pero si la historia va acompañada de un elemento audiovisual, las probabilidades de éxito aumentan, consiguiendo que los receptores lo difundan rápidamente. Por ello, los vídeos virales se han convertido en una vía cada vez más común entre las marcas para llegar a sus usuarios, así como las gráficas impactantes en redes sociales, que son compartidas por miles de ellos cada día.
Así, las marcas están inundando las plataformas para alojar vídeos, pues les permiten crear grandes estrategias de marketing e incluso crear su propio canal audiovisual dentro de dicho espacio. ¿Cuántos canales de grandes firmas encontramos en Youtube cargadas de branded content? Spots, tutoriales, noticias relacionadas, influencers usando sus productos… Por no olvidar el caso de Vine, una nueva red que ofrece vídeos cortos, casi todos en formato gift, de la que aún no se han hecho mucho eco, pero no tardarán en llegar.
Pero una buena gráfica puede impactar más, y en ocasiones es más fácil de ver por el usuario, por cuestiones de tiempo, conexión a red… Por lo que las marcas también están acudiendo a redes como Instagram, que están aumentando su interacción respecto a otras grandes como Facebook. Pero la que realmente está causando furor con sus tablones es Pinterest, donde el comercio electrónico ha encontrado un gran escaparate en el que mostrar todo lo que pueden ofrecer.
Que una imagen vale más que mil palabras, no es ninguna novedad. Si además está en movimiento y cuenta una buena historia, mucho más. Pero lo que más motiva a un usuario a promocionar una marca, son los contenidos exclusivos. Así que, esté en el formato que esté, lo mejor es que sea único, atractivo, e impactante; y si conseguimos que se sienta identificado… ¡éxito asegurado!